martes, 5 de octubre de 2010

El viaje


Miró por la escotilla como el niño que observa por vez primera un elefante, con asombro infinito y  pasmosa incomprensión. Un negro mate salpicado de puntitos blancos y brillantes lo inundaba todo.

Las preguntas se le agolpaban en la cabeza. ¿Qué hacía ella allí? ¿Por qué la habían elegido entre tantos candidatos? ¿Qué la hacía especial para aquel puesto? Su vida había sido anodina y rutinaria. Era la menor de cinco hermanos y había vivido siempre con su familia en un pueblo junto al río Volga.


Bebió un poco de agua para humedecer la garganta, ya reseca. Echó un vistazo a todas aquellas lucecitas que no le decían nada pero que no dejaban de llamarle la atención. Unas se apagaban. Otras se encendían. No parecían seguir un orden establecido ni un ritmo determinado, pero no podía dejar de mirarlas. El destello que emitían la mantuvo entretenida un largo rato hasta que poco a poco dejó de fijarse en ellas. Un nuevo objeto redondo y azul asomó por la escotilla y pasó a ser el nuevo centro de su atención. “¿Qué es esa bola enorme que se ve? ¿Por qué me es extrañamente familiar?” Una fascinación hipnótica la atrapó en un estado de semiinconsciencia en el que todas sus preocupaciones y dudas quedaron a un lado.

Una voz la rescató del limbo. ¿Había sido un sueño? Esperó un largo rato. No. De nuevo volvió a oir la voz, esta vez más fuerte y clara, pronunciando su nombre y dando a continuación una serie de órdenes que le eran familiares ya que las había estado recibiendo durante el período de instrucción.

Cuando hubo acatado todas las indicaciones, se preguntó a sí misma cuánto duraría aquello. Cuándo podría volver a casa con su familia y amigos. Ensimismada en estos pensamientos, le invadió un fuerte sopor  y el cansancio comenzó a hacer mella, por lo que decidió tumbarse para descansar un poco. Echó un vistazo al ojo de buey: la enorme bola azul había menguado de tamaño. Comenzó a tener dificultad para mantenerse despierta. Su respiración dio paso a  fuertes jadeos y la debilidad se fue adueñando de su cuerpo. “¿Qué me sucede? No me advirtieron qué hacer en caso de dificultades.”

En vano buscó con la mirada alguna salida que la ayudara a volver al mundo real, pues estaba llegando al convencimiento de que aquello no podía ser sino una pesadilla, un mal sueño producido por algún alimento en mal estado o por una simple enfermedad pasajera.

Mientras llegaba a la más completa extenuación, el delirio se apoderó de su mente y creyó oir la voz de su madre gritándole desde el cobertizo: “¡Laika, acércate! Tengo un hueso para ti.”


Otro relato de Óscar Morcillo.
Para disfrutar de más relatos de Óscar:

De tu esposo, que tanto te quiere (una carta de amor que esconde la trágica verdad)
El amor de Fahyun y Nemat (inspirado en el caso de Nemat Safavi)
Sensaciones (sobre sensaciones únicas e irrepetibles en la vida)
La lluvia y la navaja de afeitar (con un final sorprendente)
Quimerio (una historia espeluzante e intrigante)
Kaleke (la historia de un chico cualquiera)

37 comentarios:

  1. Hola: bonito el relato. Hasta el final no supe de que se trataba. Un bello homenaje a Laika, la astronauta. Felicidades Oscar.
    Saludos a los dos.

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  2. Por cierto intente votarte para lo que pides en bitacoras y no encuentro como. si me explicas te voto. saludos

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  3. Probablemente la perrita realmente tuviera esas sensaciones.
    Magnífica la capacidad de Óscar.
    Besotes Juanjo.

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  4. Pues por mi mente pasaron miles de cosas hasta que llegué al final y ya lo entendí. Cada día Junjo nos haces trabajar más la mente y eso es bueno, pues además nos pones la imaginación en marcha.
    el relato muy bonito y entretenido y no lo conocía (hasta hoy).
    Por cierto yo tampoco te pude botar ¿qué pasó?.
    Bueno Juanjo un beso y cuídate mucho, para que de esa forma también puedas cuidar a los dinosaurios de tu vida (especialmente al más chiquitín).

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  5. Como los personajes de Disney, animales con características humanas, que nos enternecen con sus ocurrencias y aventuras. Precioso relato.
    Un saludo.

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  6. @Luzysolyluna: Es que Óscar es un artista. ¿Tienes cuenta en Bitacoras? Sino no se puede votar... Saludos.

    @Fayna: Es un artista este hombre. Besos guapa.

    @Chari: Pues tú si deberías de poder, ya que tú sí tienes cuenta. ¿Cuál es el problema que te sale? Besos guapa.

    @Dean: Así es. Tenemos tanto que aprender de los animales... Un saludo.

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  7. Bonito relato mi amigo.un abrazo para tres,muaks

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  8. Estupendo.

    Embarcamos a los animales en tantos viajes que no comprenden. También, intentamos que los hombres regresen a la animalidad en otros. Reyes y verdugos de la llamada creación, a imagen y semejanza del supuesto creador.

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  9. @Juan Carlos López: Hay tanto que aprender, pero nosotros de ellos, sin duda.

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  10. hola! Ya estoy de vuelta (andaba de vacaciones). Me gusto el relato..intriga hasta el final! @++

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  11. @V de tierra: Espero que las vacaciones hayan ido bien. Me alegra que te haya gustado el relado. Saludos.

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  12. Vestido de otra forma, pero al fin y al cabo otro "experimento" con animales. Además, murió al poco tiempo de despegar, no tuvo tiempo ni de "contemplar" el espectáculo.

    Buena semana.

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  13. @Javier: Una pena... Feliz semana a tí también.

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  14. La historia de Laika siempre me ha angustiado y el relato en primera persona me ha conmovido todavía más.

    Lo has hecho de maravilla Óscar.

    Salu2

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  15. @Markos; Me alegra que te haya gustado, aunque haya sido para conmoverte, jeje

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  16. Requete bonito y tierno relato, hay que reconocer que Oscar es formidable...
    Besotes, Juanjo y a tu family,

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  17. Hermoso homenaje a la perrita Laika, Dinosaurio. Y desde aquí, te voto para bitácoras. Un poco tarde, pero más vale eso que cuando se me vaya la olla del todo y ya se haya cerrado el plazo de las votaciones. Un fuerte saludo. Y no pises fuerte, que el suelo tiembla y se caen las manzanas sobre nuestras cabezas, ja ja.

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  18. Estupendo relato,pero he de confesarte que hasta el final no sabía de que se trataba.
    Un besico

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  19. De nuevo me ha encantado este relato de Oscar. Gracias por compartirlo.
    Un beso enorme

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  20. @RossCanaria: No sólo lo es como escritor, también lo es como persona. Soy un afortunado de contar con él entre mis amistades. Besos guapa.

    @Robert: Jajaja... Pisaré más flojito, lo prometo. Gracias por el voto. Un saludo.

    @Buda: A mí me pasó igual. Besos.

    @LaMar: Gracias a tí por compartir. Un beso.

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  21. Bonito relato, Juanjo. A ver si te animas tú y nos escribes alggo de ficción, seguro que lo haces divinamente

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  22. Hola! Ya estoy de nuevo por aquí, aunque no se por cuanto tiempo, quiero adelantar la convocatoria a diciembre y no se si tendré tiempo para visitarte a menudo.

    Hoy me toca ponerme al día con todo lo que has escrito, así que allá voy!

    Un abrazo!

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  23. @Francisco Galván: Pues mira, el 8 de octubre publico un escrito que he preparado con motivo de lo de la convivencia. Aunque no es muy de ficción, más bien realidad enmascarada. Ya me contarás qué te parece.

    @Adara: Siempre es un placer recibirte, aunque sólo sea unos minutos. Ponte las pilas y mucha suerte para diciembre. Besos.

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  24. Tienes que aconsejar a tu amigo Oscar que escriba un libro recopilando historias como ésta.
    Sencillamente fenomenal!
    Un saludo!

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  25. @Alejandro Pardellas: Se lo digo a menudo. Además tiene otras un poco más largas... Pero nada, que él no se lo acaba de creer. Y mira que escribe bien. Saludos.

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  26. Fabuloso relato que desconocía, en un principio me noté desconcertado me el final me colocó en su lugar.
    GRacias por compartirlo.

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  27. @Adrián J. Messina: Me alegra que te haya gustado. Saludos.

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  28. Pues igual que a los demás, hasta el final no sabia que podía ser. Luego lo he vuelto a leer con otros ojos. Muy bueno.

    Un beso

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  29. @Palabrasalbapor: Me alegra que te haya gustado. Besos guapa.

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  30. @Adolfo S.: Y que lo digas. Un abrazo.

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  31. Mis felicitaciones a Oscar por este excelente relato y para ti mi agradecimiento para permitirme descubrirlo.Para mi este relato expresa perfectamente la angustia que muchos llegamos a sentir en nuestro viaje a través de la vida.
    Un saludo.

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  32. Juanjo ya pude votarte, ¡perdona! el problema lo tenía yo con la clave de bitácoras (la contraseña), pero ya está solucionado.
    Un besito.

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  33. @Sagitaire17: Y que lo digas, amigo, y que lo digas. Saludos.

    @Chari: Muchas gracias guapa. Besos.

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